viernes, 20 de junio de 2014
Una Vela
Todos conocemos las velas y sabemos para que sirven.
Imagina que Tú eres una vela.
Imagina que todo está en penumbras.
Bueno, hay dos opciones.
Que la vela esté encendida o este apagada.
Si está apagada, no sirve para nada.
Si está prendida, tienes otras dos opciones.
Usarla para ti y andar libre por el mundo mientras todos van chocando entre sí.
O ser luz para el que así quiera.
Tu decides, tenemos libertad de elección, libre albedrío.
Ah, cuando Buda encendió su vela podía irse libre
de este mundo y entonces dijo:
"No puedo irme de aquí hasta que todos enciendan la suya".
Así era Buda, sin egos...
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