Que bonita es la psicología, pero no la que revisamos en las escuelas.
Que hermoso es conocerse a sí mismo, aunque la psicología común y corriente sepa nada.
Los psicoanalistas los contamos a parte. Son muy estudiosos de Freud y Lacan, pero de ellos mismos saben lo mismo que un albañil de psicoanálisis.
Una jovencita me dijo:
-Tenía tantos problemas con mi novio que tuve que buscar ayuda, fui con una psicoanalista y la verdad, no me sirvió de nada. Solo perdí mi tiempo y dinero.
Claro, cada consulta está en 500 pesos... pero, ¿cómo te va ayudar alguién que está igual de perdida de que tú? Al menos tú sabes que estás perdida. El psicoanalista cree que no lo está tanto. Cree que la técnica y la teoría que leyo y memorizo sirven de algo.
Me molesta, no es que me enoje, solo me molesta que las personas que sufren vaya con gente que lleva años enteros leyendo de Lacan y de Freud, y que eso los haga sentir expertos.
Se dicen así mismos Maestros en Psicoanálisis. Yo les diría maestros en la idiotez. Maestros en la mentira. Maestros en los círculos. Y así hay agrupaciones que se autonombran Círculo Psicoanalítico. Que verdadera tontería. Y están andando en círculos, sin hacer nada ni ayudar a nadie, salvo que cobran un dineral y su ego se hace del tamaño del planeta mismo.
Si ves un psicoanalista no te quedes a oirlo mucho, están tan perdidos como cualquier otro...
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